¿Se merecía Erick pasar el resto de sus días en la cárcel?

Ponte Al Tiro

La Fiscalía General del Estado informó que un hombre llamado Erick Adrián Rivera Batista fue sentenciado a pasar el resto de sus días en prisión.

Este 14 de febrero, un Tribunal de Enjuiciamiento le dictó una condena de 125 años de cárcel que purgará en en Cereso número 3 de esta ciudad.

Pero ¿qué fue lo que hizo Erick para que cayera todo el peso de la ley contra él y lo confinara a pasar hasta el último día de su vida en la cárcel? ¿Consideras que se lo merece?

Ponte Al Tiro te relata el contexto de esta historia que comenzó hace casi 8 años.

Erick, apodado ‘El Pony’ era parte de un grupo de amigos conformado por Brian Alejandro,  Alondra Reyes, Beatriz Gómez, Isaac Santiesteban, Jonathan Eduardo y la víctima de nombre Abraham Miranda Majalca.

CRUSH LO PUSO

Era sabido en el grupo de amigos que Abraham estaba enamorado de Jonathan Eduardo y fue este pretexto el que utilizaron para invitarlo “a una fiesta” en una casa propiedad de los padres de Alondra, ubicada en las calles Rivera de Gila y Rivera de Grijalva 3051 interior 1, del fraccionamiento Portal del Valle, la cual estaba deshabitada.

Ese día, domingo 3 de mayo de 2015, Eduardo llevó a Abraham con engaños a esa propiedad. Pero en realidad ya habían planeado asesinarlo, pues Abraham era a quien le iba mejor del grupo de amigos, era estudiante universitario y laboraba en una empresa en la que le iba bien.

“En esa casa nos encontrábamos Erik, Isaac, Alondra, un cuñado de Alondra (Sergio Gómez), Bety, Eduardo y yo”, dijo Brian Alejandro tras ser capturado.

Cuando Eduardo y Abraham ingresaron a la casa, Sergio Gómez lo cubrió con una cobija y se le subió arriba de la espalda y le ordenó que cooperara o lo mataría.

“El cuñado de Alondra me dijo que lo teipeara y yo le aventé el teip a Erik y los teipió. Alondra le dijo que se hiciera a un lado y le teipió los pies y la boca, y lo metió debajo de una cama”, señaló Brian.

SUPLICÓ POR SU VIDA

 “¿Por qué, por qué a mí?, ¡ayúdame Dios..!”, suplicó el joven Abraham Miranda Majalca antes de que uno de sus verdugos le cortara la traquea con botella de vidrio.

Sin embargo, el sufrimiento y agonía de Abraham se extendió por más tiempo, ya que no murió; otro cómplice, de nombre Isaac –quien está prófugo–, retomó el pedazo de botella y lo volvió a lesionar.

Sus verdugos vieron que Abraham se desvanecía y esperaron un tiempo para que se desangrara, pero Abraham se aferraba a la vida. También se dieron cuenta de que estaba sufriendo mucho.

Luego entraron al cuarto y vieron que Abraham seguía con vida e Isaac Santiesteban salió a la calle y tomó un bloque de concreto y se lo dejó caer en la cabeza.

“Este güey ‘ta no se muere”, expresó Isaac y tomó otro bloque de concreto y finalmente la vida de Abraham se extinguió.

Así lo narró Brian Alejandro Durán Moreno, uno de los participantes en el secuestro y homicidio de Abraham Miranda, de 29 años, ocurrido el 3 de mayo de 2015 y encontrado muerto el 10 de junio del mismo año.

QUERÍAN SU LANA Y SU FORD

Según Brian, fue Jonathan Eduardo, amigo y ‘enamorado’ de Abraham, quien planeó el secuestro y crimen para robarle las tarjetas de crédito donde tenía alrededor de 300 mil pesos y el auto Ford Focus 2012.

Brian Alejandro Durán reveló que Alondra le ofreció a su cuñado Sergio Gómez la cantidad de mil 500 pesos por asesinar a Abraham y éste aceptó. Este fue quien degolló en un principio a Abraham.

LE PIDIERON NIPS DE TARJETAS

Eduardo le pidió a Brian que le pidiera las contraseñas de las tarjetas de crédito porque ahí estaba todo el dinero que tenía Abraham.

“Le quitamos todas sus pertenencias y Erik agarró su celular y empezó a borrar todo. Luego Eduardo y Erik salieron al carro de Abraham y empezó a sonar la alarma” dijo.

Erik revisó los papeles del carro y solo faltaba el título de propiedad.

Mientras tanto, Abraham le proporcionó todas las contraseñas y las cantidades que había en las tarjetas de crédito.

Inmediatamente, Alondra, su cuñado Eduardo y él se fueron a buscar cajeros automáticos mientras que Isaac y Erik se quedaron en la casa.

De un cajero sacaron 7 mil pesos, ya que era el límite, y después se fueron a otros cajeros de la Gómez Morín.

SE FUERON DE ROL A CHIWAS

Posteriormente se regresaron a la casa y Alondra le dijo a su cuñado que si estaba de acuerdo con los mil 50 pesos por matar a Abraham, y este respondió que sí.

Una vez que asesinaron a Abraham decidieron abandonar de la casa e irse a la ciudad de Chihuahua con intenciones de vender el vehículo.

“Los que nos fuimos a Chihuahua, era Alondra, Eduardo, Bety y yo. Quien manejó fue Alondra y nos hospedamos en el hotel California”, dijo Brian.

Señaló que le preguntaron a un taxista que en cuánto podrían vender el carro, y les respondió que en unos 80 mil pesos.

Como a las 9 de la noche, Eduardo recibió una llamada de su madre diciéndole que habló la mamá de Abraham preguntando por él. Alondra le dijo que no se asustaran, que al día siguiente se regresarían a Juárez.

Al día siguiente fueron a un yonke a tratar de vender el carro pero les pidieron el título, y como no lo traían les dijeron que no compraban carros robados.

El auto lo dejaron abandonado en la ciudad de Chihuahua y el martes 5 de mayo estos se vinieron en autobús a Ciudad Juárez, donde abordaron un taxi hacia la casa donde se encontraba muerto Abraham.

LO SEPULTARON EN EL PATIO

Mientras Brian y Alondra empezaron a cavar un hoyo en el patio de la casa, Bety metió el cuerpo de Abraham en unas bolsas de plástico negras y lo amarró con tape. Los otros cómplices se habían retirado a sus casas.

Esperaron hasta que oscureciera y como a las 9:30 de la noche Alondra dio la orden de arrojar el cuerpo de Abraham en el hoyo, lo taparon y abandonaron la casa.

Brian Alejandro Durán Moreno reveló que Abraham estaba enamorado de Eduardo y enterraron el cuerpo para que no lo encontraran nunca.

Con información de INPRO/Norte Digital